lunes, 21 de febrero de 2011

En el Madrid abierto...




El teléfono se ha vuelto mudo
Mi espejo se burla
El buzón sólo escupe cuentas y publicidad
Mi agenda se marchita
Y pasan los días
Las semanas
Los meses
Ya ni me acuerdo de quien soy
ni de donde vengo
Como en un desierto plagado de fantasmas
camino calles atestadas
Pero nadie nadie pronuncia mi nombre...

                                            Silvia Cuevas-Morales.

 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si tuviera tu número de teléfono te llamaría.. Si fuera tu espejo te diría que eres bella... Si supiera tu dirección llenaría tu buzón de cartas amorosas... llenaría las páginas de tu agenda con citas clandestinas.. si te viera por la calle, seguiría tus pasos y gritaría tu nombre Elvira, para espantar a todos los fantasmas..